PH: El secreto de la óptima absorción de nutrientes
Cada especie de planta tiene una escala de PH preferida en la que optimiza su crecimiento. El pH de una solución nutritiva determina la disponibilidad y la absorción de nutrientes de cada especie de plantas.
Cuando este PH no está correcto, la planta pierde su capacidad de absorber algunos de los elementos necesarios para asegurar su sano desarrollo y crecimiento. Cada planta tiene un PH determinado que le ayuda a trabajar en óptimas condiciones.
Generalmente, pese que ya hemos mencionado que cada planta posee un PH particular para crecer, la mayoría de las plantas prefieren un ambiente ligeramente ácido (entre 6,0 – 6,2) aunque la mayor parte sobrevivirá con un PH de 5,0 – 7,5.
El PH se mide en una escala de 1 a 14 siendo el 7 un PH neutro. Los valores superiores de 7 son álcalis y los valores inferiores de 7 son ácidos.
Es importante que los nutrientes que se le dan a las plantas estén bien disueltos en agua para que las plantas los absorban, sino se empiezan a adherir en las paredes de la maceta, o del sistema de cultivo que se esté usando.
Cuando el PH sube sobre 6,5 significa que los nutrientes o micronutrientes comienzan a despedirse de la solución. Por ejemplo, la mitad del hierro se precipita o se despide con un PH de 7,3 y no queda casi nada cuando el PH sube a 8. Si los nutrientes son precipitados, las plantas no pueden absorberlos lo que hace que se marchiten y posteriormente mueran.
Las soluciones nutritivas disponibles en el mercado tienen un PH equilibrado, sin embargo al disolverlas en agua de otra procedencia, como la de la llave, el PH puede cambiar a un nivel que la planta no acepta.
Los minerales más usados por los cultivadores amateur para equilibrar el PH son: el ácido fosfórico (baja el PH) y el hidróxido de potasio (eleva el PH). Estos no tienen inconvenientes ni contra indicaciones si son usados correctamente. Solo debes fijarte en hacerlo con cuidado porque la manipulación puede causar quemaduras.
Tiene que tener en cuenta que cada sistema cambiara el PH a un ritmo distinto en función de varios factores: el tipo de medio de crecimiento utilizado, las condiciones medio ambientales, la temperatura de la solución, el tipo de planta e incluso la edad de las plantas.
Por todo esto mencionado anteriormente es muy necesario e importante que el control de PH en las plantas se haga desde el primer momento y luego con frecuencia hasta llegar a la cosecha. También te aconsejamos que añadas siempre los nutrientes al agua antes de comprobar y ajustar el PH de su solución nutritiva y comprobar su nivel de PH.
Como regla general, mantenga la escala de PH entre 5,4 y 6,7 (excepto en suelo).